Una iniciativa novedosa está tomando forma en las últimas semanas: «personas de diferentes lugares del país que trabajamos en salud, educación y cultura coincidimos en la necesidad de construir una agenda conjunta desde la sociedad civil que incorpore la dimensión psico social de los cuidados para poder contribuir a llegar al fin de la pandemia hasta que las vacunas puedan cumplir su rol.»
La propuesta, de la que participamos como Observatorio, circuló por listas de correos, páginas de facebook y grupos de whatsapp, y convocó en diversos encuentros virtuales a unas 60 personas de distintos puntos del país. Resultado de estas reuniones es un documento que sintetiza las principales preocupaciones que motivan esta iniciativa, el objetivo central y las primeras propuestas que surgieron.
La falta de información (sobre la pandemia, el virus, sus efecto) no parece ser el problema (como podría pensarse de los primeros meses del 2020) sino la forma en que se vienen definiendo los discursos, los públicos a los que van dirigidos (y los que se dejan de lado) y los efectos que generan: «Creemos que hay mucha información de cuidados circulando, pero también que resulta complejo asimilarla y ver cómo nos podemos cuidar y cuidar a las demás personas.» El plano de las comunicaciones demuestra también la falta de escucha de los actores en sus desigualdades y diferencias: «los riesgos son desiguales, las posibilidades materiales de cuidarse también y las personas somos diversas, queremos entonces contribuir a “traducir” mensajes, tener mensajes dirigidos a diferentes grupos y ver como implementamos medidas de auto y mutuo cuidado en diversas situaciones de la vida cotidiana.»
La iniciativa que toma forma de campaña ha producido una serie de ilustraciones que representan distintos ejes de promoción. Además de la imagen central, se realizaron tres dibujos de color fucsia. En uno de ellos se ve una mujer con barbijo y dos títeres en sus manos. Y la frase «cercanía con distanciamiento social». El segundo es el dibujo de una persona con barbijo y un gorro. Entre sus brazos lleva una guitarra y se ven tres personajes más pequeños a su alrededor. Y la frase «divertite y también cuidate. Usa barbijo» Y la tercera iulstración muestra también una persona con barbijo. Entre sus brazos abiertos (como abrazando) aparecen otras personas más pequeñas a su alrededor. Una de ellas sostiene un cartel o una pantalla donde se ve el rostro de otra persona. Y la frase «Nos cuidamos entre pares»
«Cercanía con distanciamiento social» «Divertite y también cuidate. Usa barbijo» «Nos cuidamos entre pares»
El adultocentrismo comunicacional es uno de los problemas detectados: no se han desarrollado estrategias específicas para los jóvenes «muchos de quienes son trabajadorxs esenciales» Los mensajes han apuntado a garantizar sólo lo productivo y lo económico, dejando de lado las dimensiones del disfrute. Mientras los medios enfocan sus cámaras punitivas en los desbordes de las playas y las fiestas clandestinas, responsabilizando a los jóvenes por el aumento en los contagios (son quienes más se contagian en este tiempo, pero no los únicos), dejan de visibilizar otras acciones solidarias que también son realizadas por jóvenes.
Los riesgos y los cuidados no son percibidos por todos de igual manera. En este punto las diferencias de género, edad y clase, y las condiciones de vida de las personas también afectan las posibilidades de asumir los cuidados de igual manera. Al mismo tiempo, el sentido con que se han dotado a los cuidados ha jerarquizado lo médico – biologicista minimizando otros aspectos, necesidades y prácticas subjetivantes. El cuidado de los trabajadorxs de la salud también apareció en el grupo.
Uno de los hallazgos más sutiles de las reflexiones del grupo ha sido la problematización sobre la idea de grupo de riesgo: «Existe una dualidad entre «ser de riesgo» y «ser el riesgo» (…) pasar a pensar que no hay población de no riesgo sino población en riesgo» y se pregunta: «¿Cómo podríamos construir una representación social sobre la pandemia que nos diga que “Somos en riesgo”?» La apelación es desmantelar la lógica individualista y reforzar el sentido comunitario que liga a cada individuo a la humanidad. Y deriva en acciones de cuidado que no deje afuera el disfrute, el deseo, la subjetividad y la interdependencia: «Transitar un cambio en la concepción desde “objetos a cuidar” a “sujetxs cuidadxs y cuidadores”.»
Entre las propuestas resalta una estrategia comunicacional integral, que lleguen con mensajes diferenciados a distintas poblaciones, que muestren que hay un horizonte, que revaloricen los cuidados y autocuidados; desde lo personal pero también en lo colectivo. Una estrategia que evite mensajes moralizantes; que jerarquice la solidaridad como mandato social, que no niegue la gravedad pero que opte por el humor y no por el terror.
La estrategia que ya tiene el hashtag #LlamamientoACuidarnos se completa con la construcción de una red de acción directa solidaria que produzca como mensaje el «podés contar conmigo» y se fortalezca a partir de redes ya existentes. Una red que comparta materiales, ideas y experiencias, y que mediante acciones concretas difunda las buenas prácticas comunitarias de cuidado, y no las transgresiones que tienen tanto lugar en los medios masivos.
La apelación es desmantelar la lógica individualista y reforzar el sentido comunitario que liga a cada individuo a la humanidad. Y deriva en acciones de cuidado que no deje afuera el disfrute, el deseo, la subjetividad y la interdependencia: «Transitar un cambio en la concepción desde “objetos a cuidar” a “sujetxs cuidadxs y cuidadores”.»
La iniciativa genera expectativas porque viene a fortalecer algunos de los aspectos menos atendidos por la política pública durante la pandemia en el campo de la atención psico social, «Nuestra experiencia de trabajo en el campo académico, clínico y comunitario nos permite contar con herramientas en el campo de la subjetividad y en el campo de lo social que queremos compartir con nuestrxs semejantes para que lleguemos en conjunto a la vuelta de los abrazos. Sin nadie menos.»
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